EL EQUIPO DE GOBIERNO DE ALCOBENDAS DEJÓ LA MORALEJA SIN POLICÍA LOCAL EN LAS NOCHES DE LA PASADA SEMANA SANTA
Las noches del pasado jueves hasta el sábado no hubo policía local en la comisaría de la Moraleja, siendo su puesto ocupado por un guarda de seguridad. “Se cumple así nuestra denuncia del pasado mes de diciembre, en la que avanzábamos que el equipo de Gobierno de Alcobendas tenía previsto reducir en 2013 la presencia policial en el Distrito Urbanizaciones”, afirma el portavoz socialista Rafael Sánchez Acera.
Las noches de la pasada Semana Santa no hubo policía local en La Moraleja. Solamente un guarda privado estuvo velando por la seguridad del distrito desde la comisaría, un hecho que confirma los recortes del equipo de Gobierno en materia de seguridad ciudadana a pesar de sus desmentidos.
Los socialistas denunciaron el pasado mes de diciembre que la concejal presidenta de la Junta Municipal del Distrito Urbanizaciones, María Felicidad Palacio Vela, reveló en una respuesta por escrito que existía “un proyecto para reforzar el cierre de la base y poner un telefonillo con video” durante los turnos de noche, estando el agente que responda a las llamadas ubicado en el Distrito Norte y no directamente en la comisaría.
La presencia de agentes en La Moraleja se ha ido reduciendo así paulatinamente, ya que, como explicó la edil en su respuesta por escrito, “en lugar de contratar a un policía de servicio extra para reforzar, contratamos a un vigilante que es tres veces más económico”.
Las noches de la pasada Semana Santa hubo efectivamente un guarda de seguridad de servicio en la comisaría de La Moraleja en vez de un policía, “lo que supone un grave riesgo para la seguridad ciudadana del distrito”, advierte el portavoz del PSOE Rafael Sánchez Acera.
El portavoz socialista considera que esta medida supone “una burla” a los ciudadanos de Alcobendas y, en concreto, a los vecinos del Distrito Urbanizaciones, ya que “durante la campaña electoral se les prometió que se reforzaría su seguridad incrementando la presencia de la policía local. “No se puede prometer seguridad y después retirarla”, denuncia Sánchez Acera.
